jueves, 21 de enero de 2010

Y en esta etapa de mi vida, me empiezo a plantear seriamente el existencialismo.
El tema sobre el que reflexionaban la generación noventayochista.
Preguntas imposibles de responder, que frustrantemente supongo que nunca le encontrare solución.

¿Qué es la vida?

¿Que sentido tiene nacer si tienes que morir?

Reflexiono sobre un texto de Unamuno que me ha cautivado:


Espejo que me deshace
mientras en él me estoy viendo,
el hombre empieza muriendo
desde el momento en que nace.



Unamuno tiene razón. El tiempo nos deshace, el rostro que vemos reflejado en el espejo, aunque no lo notemos, cada vez está más viejo. Cada segundo que pasa, cada vez que abrimos y cerramos los párpados, cada suspiro que emana de nuestro interior; cada vez nuestro cuerpo se deteriora, nos estamos muriendo poco a poco lentamente, pero sin pausa, desde el momento en que nacemos. No sabemos que nos deparará el destino, el futuro, ni siquiera si tendremos futuro!
No sabemos el SENTIDO de la vida, todo es un conjunto de emociones, felicidad y bienestar pero al mismo tiempo dolor y sufrimiento. Tenemos que sufrir por cada alma que abandona este mundo terrenal. No sabemos donde irá. No sabemos si simplemente, en el momento de nuestra muerte, el celebro se desconecta y ya está, y nunca descubriremos el porqué de las cosas, ni siquiera notaremos como los gusanos carcomen nuestro cuerpo.


¿Hay algo después de la vida?


Nadie NUNCA podrá responder con autenticidad a esa pregunta.

sábado, 9 de enero de 2010

Palabras nunca dichas, aun por descifrar. Sueños invisibles, invulnerables al frío. Recuerdos en el olvido, escritos en un viejo papel. Viajes inacabados, lugares que encontrar. Lagrimas malgastadas, pudiendo recobrar. Ilusiones abandonadas, pudiendo cumplir.

No voy a dejar que mi compañero gélido me impida correr en manga corta.

Aunque hoy ha sido uno de esos días en los que el frío te hace pequeños cortes de hielo por todo tu ser, voy a salir a la calle a gritar.

Así que señor dolordecabeza lo siento mucho por ti, pero con un par de ibuprofenos insípidos te diré adiós.

Esta vez, el año nuevo ha hecho su aparición con un invierno de gigantes.

Pero me encanta el frío!

Así que, bufanda en el cuello y a disfrutar!